Gritan
las manos
cuando
no te toco,
lloran
los dedos
si no
te rozo,
bostezan
los brazos
si no
te guardan.
Hablan
mis letras
cuando
te escribo,
llora
el pecho,
si no
te escucha,
se
estremece la piel
cuando
te sueño.
Saboreo
tus labios
mientras
te beso,
huelo
tu aroma
si te
poseo,
y
muerdo tu alma
entre
breves sollozos.
Subo
al cielo
cuando
me reclamas,
bajo
al infierno
si
juntos pecamos,
mueran
las noches
con
tu mejilla,
sobre
mi recostada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario