lunes, 28 de abril de 2014

No tengo ganas de escribirte



No tengo ganas de escribirte,
tampoco tengo ganas de hablarte,
ni tengo ganas de desearte
y menos tengo ganas de tocarte.

No quiero escuchar tus palabras,
ni siquiera mirarte un solo instante.
No quiero esperarte más cada noche
y menos morir por tu respirar.

No volveré a ser tu sucio pañuelo
al que recurrir como segundo plato,
o a llorar por tu ausencia cotidiana
mientras bebes otras mieles pasajeras.

Voy a abrir las ventanas y dejar entrar al sol,
para que borre esa humedad grisácea
de la que has pintado mi monótona existencia.
Voy a tirar esas sábanas y compraré nuevas.

Rasgaré toda esta ropa de viejo algodón
para vestir del color de la primavera venida,
escuchando a los gorriones ayer olvidados
mientras siembro jazmines en el balcón.

Cuando llegue la tarde pecaré conmigo
y descubriré aquello que anhelaba descubrir,
que tus brazos hace tiempo que me negaron
y no recuerdo a que lugar lo relegué.

No tengo ganas de escribirte,
pero si de escupirte lejos de mi vida.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Popular Posts

Advertisement

Blogger news

Formulario de contacto

Nombre

Correo electrónico *

Mensaje *