Naces despacio
siendo solo una palabra,
imagen de un sentimiento
que lucha por salir.
Vas creciendo mientras subes
recorriendo mis hinchadas venas,
hasta llegar a las manos
con las que convertirte en tinta.
Pasas por el corazón
y te paras en los deseos,
cruzas por los recuerdos
y descansas en los sueños.
Llegas al papel
y después a sus ojos,
donde descenderás a su corazón
y quizás te conviertas en lágrima.
Cuatro líneas con las que hablarte,
solo cuatro líneas
con las que narrarte lo que siento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario