Que triste se vuelve el sueño
en la madrugada al despertar,
cuando se rompe la magia
y tus besos ya no están.
No lloran los ojos
pero se encoge el corazón,
cuando tu recuerdo sigue
y el deseo queda.
Al volver a dormir
ya no compartes el lecho,
las sábanas han desaparecido
dejándome sin tu beso.
Otro día te volveré a soñar
y también a despertar,
esperando que en la mañana
te pueda abrazar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario